La Quinta da Regaleira fue ideada por António Augusto Carvalho Monteiro y contrató al arquitecto Luigi Manini para construirla. La construcción de la finca tuvo lugar entre 1904 y 1910. La finca presentaba diversos estilos arquitectónicos y estaba adornada con motivos simbólicos que reflejaban los intereses e ideologías de Carvalho Monteiro, concretamente en la masonería y los templarios. El pozo iniciático de la propiedad es quizá el ejemplo más importante de sus creencias esotéricas.